Llegan a tu casa, te echan, le prenden fuego, asesinan a unos cuantos vecinos y dicen que les has matado a 8 policías que iban a arrasarlo todo con orden judicial. Orden de exterminio, se supone.
Y luego se mosquean porque la gente se alborota y protesta.
Qué vergüenza de contención.
Me acuerdo mucho de Salek, pobre. Qué pensará del futuro de su pueblo…